Reflexionemos algo más sobre el asunto de la justicia de Dios y sus consecuencias.
Como ya hemos dicho Dios para ser Dios tiene que ser ilimitado en todas sus perfecciones, si no lo fuera en una sola cosa, no sería Dios, porque entonces existe la posibilidad de que otro ser, sea más ilimitado y éste sería Dios.
Por tanto, del punto de vista de la justicia, Dios es lo Justo por excelencia, o mejor, Dios es la propia Justicia en su grado máximo.
De este modo respondamos algunas preguntas bajo la óptica de la unicidad, y después, de la pluralidad de las existencias.
Como ya hemos dicho Dios para ser Dios tiene que ser ilimitado en todas sus perfecciones, si no lo fuera en una sola cosa, no sería Dios, porque entonces existe la posibilidad de que otro ser, sea más ilimitado y éste sería Dios. Por tanto, del punto de vista de la justicia, Dios es lo Justo por excelencia, o mejor, Dios es la propia Justicia en su grado máximo.
De este modo respondamos a continuación algunas preguntas bajo la óptica de la unicidad, y después, de la pluralidad de las existencias.
Si nuestra conducta en una solos y única vida es lo que definirá nuestra suerte futura, si tormento o gracia eterna, ¿cómo deberá ser evaluado aquel que tiene mayores facilidades en relación al que sólo tiene dificultades en su vida? Nuestro mundo es un mundo de contradicciones, asi tenemos aquellos que tienen plena salud, otros que pasan toda su vida luchando con varias especies de dolencias, a veces preso en el lecho durante toda su encarnación. Unos tienen gran poder económico, otros están totalmente desprovistos de recursos. Existen además aquellos que no tienen la mínima oportunidad de estudiar y adquirir conocimientos, otros frecuentan las mejores escuelas consiguiendo los mayores destaques.
Podemos aún preguntarnos sobre los niños que desencarnan en la más tierna edad sin tener la oportunidad de mostrarse ni buenas ni malas. ¿Tendrian ellos el cielo sin ningún esfuerzo de progreso moral, o estarían destinadas al infierno sin mayores merecimientos?
Cualquier ser humano que tenga un poco de buen sentido percibe que de acuerdo con la propuesta de una vida única, todo esto suena como una gran injusticia.Siendo Dios la Soberana Justicia, ¿estaría todo eso de acuerdo con Sus propósitos superiores? Creemos que no. Y si la ley de las existencias múltiples en el análisis y todo queda de acuerdo con la justicia De aquel que es todo Poder. Cualquier situación de carencia actual, denota un anterior mal uso de determinado recurso; las posibilidades que tenemos son oportunidades de fijación de una virtud a través de la buena utilización de las mismas. Esa es la Ley. Ley que está en pleno acuerdo con la moral, Ley que muestra la grandeza del Creador y nos descortina toda su Sabiduría.
Veamos ahora otra pregunta. ¿Por qué todo eso es necesario? ¿Por qué tiene el espíritu tras una dura existencia que volver nuevamente a habitar un vestido físico reiniciando siempre?
Allan Kardec pregunta a los espíritus sobre esto y ellos informan que al no conseguir el espíritu alcanzar la perfección en una sola existencia, reencarna tantas otras veces cuantas fueren necesarias para alcanzar ese objetivo.
Podríamos insistir en la pregunta, ¿por qué es necesario este modelo, no podríamos evolucionar en el plano espiritual sin necesitad de volver al cuerpo físico? Los espíritus responden a Kardec que no, es necesario que haya nuevamente la encarnación, o sea, el regreso a la vida física.
Hay una explicación dada por Pietro Ubaldi (filósofo italiano autor del libro "La Grande Síntesis"), basada en el conocido concepto místico de la "CAÍDA de los ángeles" . Pero Ubaldi dice la creación original de Dios es puramente espiritual y que todo lo que se conoce como creación: materia, espacio, tiempo y formas surgió debido a esa CAÍDA, causada por la insubordinación
de muchos espíritus. Y a partir de ahí el espíritu se aprisionó en la materia, debiendo entonces realizar su regreso al estado "original", lo cual se da por la evolución.
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