Naturaleza de la vida
después de la muerte
El
Espiritismo es una Doctrina consoladora por excelencia, ele demuestra por hechos
patentes la inmortalidad del alma, su individualidad después de la muerte y la necesidad
de la reencarnación para el perfeccionamiento, pues somos perfectibles. Todos esos
principios están resumidos en las cuestiones 149, 150, 152, 166, 166-a, 166-b,
166-c y 223 de El Libro de los Espíritus de ALLAN KARDEC.
DESTINO
de las ALMAS DESPÉS de la MUERTE.
¿Qué
acontece con el alma tras la muerte? la de los buenos irán al cielo y la de los malos al infierno? ¿Habría un purgatorio, un lugar determinado para la
ascensión al cielo o como preparativo para la reencarnación de aquellas almas
necesitadas de purificación?...
Esas
preguntas, excepto la primera, serían respondidas con un sí por la mayoría de los
religiosos brasileros... Inclusive DANTE ALIGHIERI en su La Divina Comedia, describe minuciosamente INFIERNO,
PURGATORIO y CIELO, de manera genial, aunque con las enseñanzas y los conocimientos
"científicos" y míticos medievales y el no menos genial GUSTAVO DORÉ
ilustró magistralmente tal obra, a pluma y tinta.
Curiosamente,
algunos cofrades sincretizan tales conceptos de cielo, infierno y purgatorio y
admiten cosas semejantes a aquellas descritas en La Divina Comedia – del oscurantismo
medieval –diciendo que tras la muerte seremos encaminados para un "Pronto
- Socorro Espiritual" y de ahí, para "colonias espirituales". No obstante, no es eso lo que está
explícito e implícito en la Doctrina de los Espíritus; por eso, juzgamos importante
tratar aquí de la cuestión básica relativa a la erraticidad y de los
Espíritus errantes...
¿Qué seremos al desencarnar?
Estamos
encarnados en la Tierra para pruebas y expiaciones, por eso somos, en la abrumadora
mayoría, Espíritus inferiores. Al desencarnar seremos, en la casi totalidad, Espíritus
errantes y eso
está bien claro en la respuesta a la cuestión 224 de El Libro de los
Espíritus de
ALLAN KARDEC, o sea, en os intervalos de la encarnaciones el alma es un "Espíritu
errante, que aspira a un nuevo destino y lo espera".
La
erraticidad no
es una señal de inferioridad entre los Espíritus, pues estos allí existe en
todos los grados (cf. respuesta a la cuestión 225, op.cit.), mas solamente los
Espíritus Puros
no son errantes,
pues su estado es definitivo (cf. respuesta a la cuestión 226, op. cit.).
En
fin, Espíritus errantes son aquellos en tránsito, que esperan una oportunidad de reencarnación
en nuestro
planeta o en otro... Aunque podamos evolucionar en el estado errante – a través
del estudio do nuestro pasado y observando los lugares que recorremos, oyendo a
los hombres esclarecidos y captando los consejos de los espíritus más elevados
(cf. respuesta a la cuestión 227, op. cit.) –, es a través de la existencia
corpórea que
pomos en práctica
las ideas adquiridas en la erraticidad (respuesta a la cuestión 230 'in fine').
Ahora,
hay una serie de libros mediúmnicos en que aparecen Espíritus, con falsa
modestia no disimulable, que se dicen "imperfectos" y que estarían "ayudando
a los hermanitos encarnados", durante siglos en la erraticidad. Como uno
de ellos, en un Centro en que frecuentamos, que decía ser el "padre Joaquín",
que – tras un intercambio de ideas, preparatoria, para una sesión mediúmnica –,
se dirigió directamente a nosotros, diciendo:
––
Dr., el Sr. tiene preconcepto contra los prietos - viejos?
A
lo que respondimos, entonces:
––
Es por no tener preconcepto que no entiendo porque el Sr. se intitula "padre
Joaquín"!
En
seguida, hizo una larga explicación, muy repetida en muchos Centros, de que la
encarnación preferida suya fue la de un esclavo, por eso se intitulaba así. y
finalmente dijo:
––
Estoy aquí en este plano hace más de 300 años, tengo muchas imperfecciones, mas procuro ayudar a los
hermanitos encarnados.
Respondimos,
entonces:
––
Si está hace tanto tiempo ahí, y con imperfecciones, por que no reencarna?...
A
seguir, él (no se si el Espíritu o el médium) se mostró desconcertado, vacilante,
sin gracia; tropezó en las palabras y no trajo ninguna enseñanza nueva, solamente
frases – hechas...
O
sea, determinados libros mediúmnicos están apartando cada vez más las personas
de la Doctrina de los Espíritus, pues algunas excrescencias doctrinarias son tenidas
como verdadera Doctrina...
Las
llamadas "colonias espirituales" son de existencia cuestionable
Hay
una gran falla en nuestro movimiento espírita al admitir que quedamos, casi
enclaustrados en "colonias espirituales", a recibir consejos de
Espíritus, como se sí estuviésemos encarnados, como en aquellas imágenes de
DORÉ sobre la Divina Comedia de DANTE... hasta un tal "valle de los
suicidas" es acreditado como verdadera Doctrina de los Espíritus!... Con
todo, en las obras de KARDEC no hay la menor referencia ni a las colonias
espirituales ni al valle de los suicidas. Sería una omisión imperdonable de la
Espiritualidad Superior!
Acreditamos
en que, al desencarnar, la nueva vida es eminentemente espiritual, nada de mundos especiales,
"copias perfeccionadas de los objetos de la Tierra", como dicen
algunos cofrades. El mundo de la erraticidad es un mundo de reflexión en que nos preparamos para
una nueva encarnación, mas esa preparación no tiene nada de material.
Algunos
argumentan que aquellos Espíritus más tierra-a-tierra no conseguirían vivir sin
la materia !!! Ora, si no consiguieren vivir sin la materia, al desencarnar no
saldrían de aquí del orbe terrestre, es lo que se infiere del inicio de la
respuesta a la cuestión 232 de El Libro de los Espíritus, esto é:
"(...)
Cuando el Espíritu dejó el cuerpo aún no está completamente desligado de la materia
y PERTENECE al mundo en que vivió o un mundo del mismo grado(...)"– el destaque es
nuestro.
¿
Los Espíritus superiores no pueden reencarnar?
Nunca
debemos olvidar de que estamos rodeados de espíritus desencarnados, errantes, y
son ellos que nos dan buenas o malas inspiraciones. Aunque aquí en la Tierra
predominen los malos espíritus, tenemos también Espíritus Superiores, en menor número, es el caso
de los Espíritus – Guías de cada uno de nosotros...
A
propósito, es un sofisma afirmar que un Espíritu Superior tendría dificultad de vivir a
la Tierra y seria imposible, en determinado caso, a su reencarnación terrena;
pues, argumentan, su fluido es muy diáfano para suportar os fluidos terrenos.
Ora, el periespíritu es extraído del planeta en que el individuo está encarnado (cf.
cuestión 94, op. cit.) ou situado; obviamente, hay variaciones individuales,
mas a su constitución es siempre la misma para cada orbe.
La
Doctrina de los Espíritus es bien clara en este aspecto, ella nos dice en relación
a los Espíritus Superiores, los de segundo orden: "Cuando, por
excepción , se encarnan en la Tierra, es para cumplir una misión de progreso y,
entonces, nos ofrece el tipo de perfección a que la humanidad puede aspirar en
este mundo."(cf.
item 111, 'in fine', de O Libro de los Espíritus). Un ejemplo maravilloso dr
este caso fue la encarnación de JESUS (cf. Cuestión 625 , op. cit.) y a este
respecto dice KARDEC:
"Jesús
es para el hombre el tipo de perfección moral a que puede aspirar la humanidad
en la Tierra(...)"
(cf. Comentario ab initio a la cuestión 625, op. cit.).
Sabemos
que el asunto es polémico en relación a JESÚS, pues algunos lo juzgan un
Espíritu Puro, de primer orden y, por eso, no más sujeto a la encarnación . Aun
admitiendo que JESÚS sea un Espíritu Puro, ¿cuál es la imposibilidad de su encarnación?... en
nuestro modo de entender no hay ninguna imposibilidad, tanto así que él reencarnó de facto y hay pruebas de
ello. Mas no entraremos en esta discutíon, pues no es el propósito de este
estudio.
En
fin, en la erraticidad no existe cielo, infierno ni purgatorio, en lugares determinados;
eles existen sí, en la conciencia individual. Muchas veces esos Espíritus
se atraen por sintonía, mas, como Espíritus no son capaces de formar cuadrillas, como
del Comando Rojo, Tercer Comando, aquí de la Tierra. Son espíritus cuyo
"infierno" consiste – cuando renitentes en el mal –, en no poder
poner en práctica sus malos tendencias y esto está bien
claro en la respuesta a la cuestión 970, 'in fine', de El Libro de los
Espíritus:
"Desean
todos los gozos y no pueden satisfacerlos. es eso lo que los tortura".
Muchos
cofrades temen a los obsesores en una reunión mediúmnica, alegando hasta que algunos
son jefes de falanges infernales!... Más importante que adoctrinar al obsesor (lo que es más fácil) es
llevar al obsesado
a desprenderse de la sintonía que lo liga a su victimario, pues al final de cuentas
ambos son victimarios - víctimas.
EPÍLOGO
El
Cielo, el Infierno, el Purgatorio, las Colonias espirituales, son fantasías
espirituales sin
ninguna sustentación científico – doctrinaria, son elucubraciones místicas
de Espíritus aún apegados a la materia y de algunas personas simplonas que no
consiguen concebir el mundo espiritual sin materialidad.
Al
desencarnar en la Tierra, un planeta inferior, por mejores que seamos no
alcanzaremos, inmediatamente, la condición de Espíritus Puros y por más
obstinados que seamos en el mal, no quedaremos eternamente en esa condición de
"legionarios infernales", pues la Providencia Divina nos da el libre-albedrío, propiciándonos el
arrepentimiento. La Ley Divina es Misericordiosa...
Autor; Iso Jorge Teixeira — Psiquiatra. Libre-Docente de Psicopatología y Psiquiatría de la Facultad de Ciencias Médicas (FCM) de la Universidad del Estado de Río de Janeiro (UERJ).
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